sábado, 13 de abril de 2013

Evolución lítica

Con el tiempo la industria lítica evolucionó llegando a encontrarse este tipo de constrastes.


martes, 9 de abril de 2013

Arqueología experimental

 La arqueología experimental trata de recuperar las técnicas antiguas. Aquí tenemos un ejemplo de varios procesos que se realizaban durante la Prehistoria.



sábado, 6 de abril de 2013

Dieta de los Australopithecus

Los Australopithecus afarensis, homínidos que vivieron en África hace entre unos 2 y 4 millones de años, se alimentaban preferentemente de frutos ricos en azúcares, pero en las épocas desfavorables no hacían ascos a semillas, raíces, tubérculos o cortezas. Los científicos han llegado a esa conclusión por las marcas que que dejan los vegetales y frutos duros sobre el esmalte de los dientes.

miércoles, 3 de abril de 2013

El cociente de encefalización en la Evolución Humana

El cociente de encefalización calcula el aumento del tamaño del cerebro con respecto al tamaño del cuerpo. Los animales con un alto coeficiente de encefalización son los que tienen los cerebros más grandes respecto a su tamaño corporal, en comparación con el coeficiente promedio del grupo biológico completo. La mayoría de los primates y los delfines tienen altos coeficientes de encefalización respecto a otros mamíferos, aunque algunos primates (especialmente los humanos y los simios) tienen los mayores coeficientes de encefalización.
 
Así por ejemplo es interesante observar que los elefantes tienen un cerebro 5 millones de veces mas grande que el de una abeja y es justamente por su mayor tamaño que las señales cerebrales necesitan mucho más tiempo que en las abejas para recorrer los múltiples circuitos y conexiones internas para llegar a destino, además, tienen mucho más datos que procesar provenientes de los billones de células conque cuenta el cuerpo del elefante y que ese cerebro maneja, por lo que el elefante, con gran cerebro, resulta ser un animal relativamente lento, torpe y de pésimos reflejos. Por el contrario, las abejas, con un pequeñísimo cerebro, son capaces de trasladarse velozmente, tener un código de comunicación social, orientación solar y saben sortear diversos obstáculos sin dificultades como así también, calcular la cantidad de miel a consumir según la distancia a recorrer teniendo en cuenta el camino más eficiente.
 
En el caso de los humanos, este cociente de encefalización no corresponde a la inteligencia final de un humano sino a la capacidad que puede llegar a tener. Un ejemplo muy sencillo está en el mundo del deporte, si uno no entrena ciertas habilidades no podrá llegar a convertirse en un experto. Si no "entrenas" el cerebro no serás inteligente e incluso algunas especies como menos capacidades parecerán más "listas" que tú.
 

martes, 2 de abril de 2013

El pulgar oponible


Gracias a la mano prensil (consecuencia directa del pulgar oponible) hemos sido capaces de manipular primero la piedra y luego los metales. Con esos materiales fuimos capaces de crear herramientas con las que cazar y recolectar. Poco a poco las herramientas fueron siendo más sofisticadas, adquiriendo la capacidad de vivir de la agricultura y la ganadería. Con ello nos establecimos de forma sedentarias, creando pequeños núcleos de población, que a día de hoy se han convertido en las grandes urbes y pequeños pueblos en los que toda la población del planeta vive.


El descubrimiento de Lucy

Lucy es el esqueleto fosilizado casi completo de un homínido perteneciente a la especie Australopithecus afarensis, de 3,2 millones de años de antigüedad,2 descubierto por el estadounidense Donald Johanson el 24 de noviembre de 1974 a 159 km de Adís Abeba, Etiopía.
Se trata del esqueleto de una hembra de alrededor de 1 metro de altura, de aproximadamente 27 kg de peso (en vida), de unos 20 años de edad (las muelas del juicio estaban recién salidas) y que al parecer tuvo hijos, aunque no se sabe cuántos. Dotada de un cráneo minúsculo, comparable al de un chimpancé, Lucy andaba sobre sus miembros posteriores, signo formal de una evolución hacia la hominización. La capacidad bípeda de Lucy puede deducirse de la forma de su pelvis, así como también de la articulación de la rodilla.
Hasta 1977, la comunidad científica no tomó en consideración el hallazgo de Johanson y su equipo del International Afar Research Expedition. La revista Kirtlandia aceptó publicar el descubrimiento del nuevo homínido, al que sus autores asignaron el nombre científico de Australopithecus afarensis.
La datación de una capa de material volcánico en el emplazamiento por el método de potasio-argón, dio una edad inicial de 3 millones de años con un margen de 200 000 años. Sin embargo, el material presentaba ciertas impurezas, haciendo la datación no muy precisa. Mediante la aplicación de otros métodos, incluyendo bioestratigrafía y paleomagnetismo, entre otros, se corrigió la datación a una edad de 3,2 millones de años. En el mismo sitio, un año después, se hallaron restos pertenecientes a un mínimo de seis individuos, dos de ellos de niños de unos cinco años, pero el esqueleto más completo fue el de Lucy, de quien se encontraron un total de 52 huesos. Actualmente los restos de Lucy están guardados en una caja fuerte en Adis Abeba, capital de Etiopía.
El nombre Lucy proviene de la canción «Lucy in the sky with diamonds» del conjunto musical The Beatles, que escuchaban los miembros del grupo investigador la noche posterior al hallazgo.